El descubrimiento del verano.
Un lugar emblemático con vistas al mar y a la montaña, un menú por un precio estupendo, una carta con variedad de platos, y un servicio algo más que competente son los pilares fundamentales de este local ubicado en el Club Náutico de Altea. A continuación, os describimos nuestra visita, y os haremos salivar con las fotos de los platos que probamos. Sin duda ha sido el descubrimiento del verano, y volveremos pronto, de eso estoy segura.
Cómo hemos acabado aquí.
Buscando por el Albir mi hermana y yo un lugar que nos atrajera para comer, dando vueltas a la deriva con el coche, y tras pasarnos un rato buscando en guías y buscadores en internet, hemos acabado por fortuna en el Club Náutico de Altea. Ha sido un golpe de suerte y me explico: esta mañana nos hemos metido en su página de Facebook y tras ver la foto del menú de ayer, que no nos convencía mucho, tomamos la determinación de buscar otro lugar donde almorzar.
Después de dar 3 vueltas por el pueblo costero, hemos llegado a la conclusión de que somos de sitios fijo, y que nos cuesta mucho probar lugares nuevos por temor al fracaso gastronómico,últimamente no estoy dispuesta a hacer críticas de sitios que no me hayan gustado, dado que no han tenido muy buena aceptación. Ya que me gustaría mantener este blog, y una de las cosas divertidas de conservarlo es la aventura de las nuevas sensaciones, al final hemos optado por acercarnos al puerto, con la idea de que si no nos gustaba el menú, podríamos pedir algunos entrantes para compartir.
El lugar.
El restaurante Can tapes del Port, se encuentra en el Club Náutico de Altea en la Avenida del Puerto 50. La calle de acceso está sin pavimentar, y el coche ahora en verano que es difícil de aparcar hay que dejarlo en el recinto exterior entre piedra y arena. Un cartel exterior de pizarra, rezaba el menú de hoy, que nos ha parecido mucho más suculento que el de ayer. Una vez que hemos entrado, hemos podido ver cómo varios pescadores estaban descansado de la salida matutina, tomándose una cerveza o picando algo. Un grupo de padres recogía a sus hijos de las actividades náuticas que el Club organiza en verano. Hay una piscina donde supongo se realizarán actividades acuáticas, aunque no se si será de uso público. Hemos conseguido con suerte una mesa en la terraza, pese a que habían varias reservadas y poco después ha habido gente que ha tenido que esperar.
Qué hemos comido.
Después de leer el menú que se anunciaba en el exterior por 18 euros, hemos comprobado que también existe la posibilidad de degustar otro con más platos por unos 30€ (se me ha pasado hacer una foto). Tras echar un vistazo a la carta lo hemos tenido claro: queríamos probarlo todo. Me parece muy buena idea que existan las medias raciones, lo que ha permitido que pudiéramos probar varios platos. Nos hemos decantado por una ensalada, una ración de pulpo, unos buñuelos de bacalao, y un plato de tataki de atún que se ofrecía en el menú. En cada una de las imágenes describiré con más detalle cada plato, pero señalar que en general nos han parecido todos exquisitos, y realizados con muy buen gusto. Junto con la bebida, unas cinco cañas, hemos salido a unos 20 euros por cabeza, lo que nos ha parecido un precio muy competitivo dado la calidad del producto y la frescura de la materia prima.
Trip Advisor.
En el número 94 de 205 restaurantes en Altea según Trip Advisor. O se come muy bien en Altea, o este puesto en el ranking me parece muy injusto. Aunque casi es preferible que los sitios de este tipo no sean descubiertos, para evitar masificaciones.
Contacto.
Recomiendo reservar, especialmente en verano, donde su terraza se llena de gente.
Telf: +34 965843476
Facebook: https://www.facebook.com/cantapetes/

Imagen del pan, que nos han cobrado, por lo que entiendo que merece una foto. Comentar que hemos mojado las salsas de todos los platos con él, así que ha hecho una gran función.

Buñuelos de bacalao con espuma (¿?) de allioli. Estaban riquísimos, aunque releyendo la carta ahora, el tema de la espuma, no la he encontrado en ningún sitio. Aún así, el que nos han servido, el de toda la vida, estaba delicioso.